Motilado juvenil, barba de tres días, sonrisa de padre orgulloso. Faltan un par de días, pero nadie le quita la expresión de felicidad al rostro de Andrés Felipe Orozco.Nuevo jugador de Nacional, aspirante a capitán, líder de la defensa. Este hombre vive un inmejorable comienzo de año, pese a no haber tocado un balón todavía.No es necesario preguntarle los objetivos. Sabe que vino para ganar, que se le pidió liderazgo y que lo tiene que aportar. "No queda de otra sino ser campeón, volver a llevar al equipo a la Copa Libertadores".Hoy vive unos buenos días. Después de seis años por fuera de Colombia (estuvo en 2007 con el DIM), Andrés vive buenos años. La muerte de su padre, en plena celebración de la Copa Libertadores de Nacional en 1989, y la pérdida de un hijo hace un par de años, lo hicieron más fuerte.Hoy se pone la camiseta de Nacional y está a punto de tener a Emiliano, su niño. Y eso lo hace una persona feliz, más allá de los títulos o las vueltas olímpicas.
¿Cómo le quedó la camiseta verde?
"Pues solo me puse la de entrenamiento. Para la otra hay que esperar. Muy contento, estoy feliz de estar acá, en un grupo que se ve muy bueno, muy sano".
¿Es hora de terminar con ese cuento de que antes fue rojo ahora verde..?
"Sí, eso es claro. Lo digo abiertamente, hay que tener cultura. Uno se debe al equipo que te quiere, más si es de la tierra. Téngalo por seguro que me voy a entregar por esta camiseta".
¿De lateral o central?
"Huy no, no, no, ni me lo comente. Eso fue un tiempo en que me pidieron hacer ese puesto. Pero no vuelvo ahí. Mi lugar es como central".
¿Qué le dejó esa correría por tantos países?
"Estar en México, Brasil, Argentina te llena de experiencias lindas, la oportunidad de conocer, estar en otro tipo fútbol. De aprender mucho de la gente, de conocerse a uno mismo, saber qué puede dar y qué se puede exigir"
¿Fue un diciembre especial al saber que no había que tomar un avión para el extranjero?
"Eso fue una delicia. Estar al lado de mis seres queridos, de mi mamá, de mi familia. De mi esposa en embarazo. Saber que no tenía que volver a viajar... una maravilla".
¿Qué significa la llegada de Emiliano (su hijo que nacerá en dos semanas)?
"Es la felicidad, estar pleno. Es la oportunidad de conocer lo que es realmente la vida, ser feliz".
Hablar del niño le crea una sonrisa inmediata...
"Es así. Luego de la experiencia triste de la pérdida de un hijo antes, ésta es una alegría. Con la ayuda de Dios todo va a salir bien".
Es claro y obvio que quiere ser campeón, ¿pero usted, como persona, que pretende lograr?
"Mejorar, crecer cada día más. Estoy convencido que estoy en un plantel que me va a ayudar a ser mejor".
Para Baiano y usted la exigencia va a ser muy brava...
"Siempre que llego a un equipo hay presión. Acá va a ser igual, pero vamos a mostrar cada ocho días lo que tengo. Estoy preparado, quiero dejar una huella en esta institución. Yo estoy para cosas grandes".
1- Pidió la camiseta número cinco, la misma que utilizó con Colombia en un par de Copas América. En su recorrido están Quindío, DIM, Racing, Morelia, Dorados, Inter de Porto Alegre.
2- Andrés Felipe jugó 230 partidos en los cinco años que estuvo en el fútbol del exterior. Dice que sus mejores momentos afuera los vivió con Racing Club, entre 2003 y 2005.
3- El zaguero viene de ser campeón con el Internacional de Porto Alegre, Brasil, de la Copa Suramericana, aunque jugó poco. Llegará por un año a préstamo a la institución verdolaga.
Tomado de elcolombiano.com